EL "SOCIAL MEDIA" Y EL CANSANCIO MENTAL

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Me empiezan a cansar las redes sociales. De hecho, cada vez participo menos y observo más. Y es una pena porque pueden ser un instrumento muy bueno para conocer gente y proyectos y darte a conocer tú mismo/a. Yo misma en este blog defendí los beneficios de las redes para buscar empleo, hacer redes de confianza, pero la verdad de un tiempo a esta parte (¿pandemia?) dejan mucho que desear. Eran otros tiempos.

Y esta época de observación me ha llevado a varias conclusiones.

Pasar tanto tiempo en casa frustrados, con restricciones y limitaciones parece que ha sido el detonante definitivo para verter todo este odio e impotencia en la social media. Comparto muchos puntos de lo que dice Andrés Pérez- Ortega en su artículo  Internet. ¿Merece la pena seguir trabajando las redes?, que cada vez parece más inútil usar este medio para dar a conocer tu propuesta de valor.

Las redes cada vez están más desvirtuadas, muy politizadas (incluso en sitios como LinkedIn que no entraban en eso, se ven mensajes de tendencia política), totalmente polarizadas (o conmigo o contra mi), con discusiones poco constructivas y por cualquier tontería, y tendiendo a deshumanizar al que piensa diferente porque todo el mundo cree que tiene la razón y todos los demás están equivocados o son tontos. Tremendo. Intentas que no te afecte pero siempre hace un poquito de mella.La solución, conectarse lo menos posible como mecanismo de autodefensa.

LinkedIn es el portal profesional de referencia pero últimamente también está cayendo en estos vicios. He de decir que me abordan más para comprar productos o servicios que no necesito que para ofertas de empleo o colaboraciones con beneficios para las dos partes (lo del "acoso publicitario" en redes también es para otro post largo).

Como dije, la crispación general empieza a hacer mella y se refleja en comentarios y opiniones más radicalizados, en una red que era más comedida y respetuosa.

La solidaridad y networking parece camuflarse cuando alguien indica que busca empleo con urgencia, y salen mensajes de "ánimo, que quien quiere puede", "es un bache, el esfuerzo tiene su recompensa..",y más proclamas por el estilo que tanto daño han hecho y no ayudan en nada al afectado/a...posible buena intención pero poca acción y colaboración.

Twitter. Cada vez que entras dan ganas de bajarse del mundo. ¿De verdad la gente es así de cruel en realidad? Es el contenedor del odio de cientos de frustrados con la vida. Quiero pensar que es una pequeña parte de la población y que aún hay esperanza para el mundo. Antes twitter molaba, con tuiteros muy ingeniosos y  buen rollo en general, pero ahora gana quien descalifica más y mejor.

Ya no hablo de Facebook porque para mi es una red que hace tiempo que está perdida en el océano. E Instagram es para lo que es, aunque he de reconocer que es la más relajada de ver. Lo visual supera a la palabra escrita, aunque siempre hay alguno/a que es incapaz de tener la boca cerrada y pone el comentario feo de rigor.¿Por qué esa manía de opinar de todo y todos?  

Supongo que al cancelarse los eventos presenciales también se ha perdido cierta humanización y diplomacia. Hay comentarios que en persona no le dirías jamas a alguien porque le ves la cara y su reacción y procuras ser más comedido/a o simplemente callarte. Tanta virtualidad nos ha robotizado de alguna manera.

Me gustaban las redes sociales como medio de conexión y espero de verdad que esta situación dé un giro y de verdad aprendamos a usarlas de manera productiva y positiva para desarrollar comunidad, colaboración real y conocimiento.